domingo, 8 de mayo de 2011


Ballesteros, un mito

Editorial- El Periódico de Cataluña- Domingo, 8 de mayo del 2011
Definir a Severiano Ballesteros como el equivalente para el golf de lo que fueron Ángel Nieto o Manuel Santana, respectivamente, para el motociclismo y el tenis es tan cierto como incompleto. Porque el genial deportista cántabro, fallecido ayer de cáncer a los 54 años, no solo fue el artífice del despegue en España de una disciplina hasta entonces muy minoritaria, sino sobre todo el hombre que influyó decisivamente en la evolución del golf a a escala mundial. La concepción y las técnicas de este juego cambiaron por completo desde que Ballesteros irrumpió en el estrellato al ganar el Abierto Británico de 1979, su primer gran éxito internacional.
Los británicos, inventores del golf, adoptaron enseguida como uno de los suyos a Seve, transmutándolo en Sevvy. Pero lo que le confirió la condición de mito en el orbe anglosajón fue el papel central que tuvo en el equipo europeo de la Ryder Cup, con el que en los años 80 rompió e invirtió la hegemonía de EEUU, que se remontaba a medio siglo atrás. Desde entonces, Ballesteros era venerado por los británicos, y aunque en España también gozaba de gran admiración, es posible que aquí muchos no fueran conscientes de las dimensiones colosales de su figura, quizá porque el golf, aunque ya no es el deporte clasista de otras épocas, todavía no está al alcance de todos los ciudadanos. Ballesteros dedicó esfuerzos a que así fuera, y también por eso se le recordará, además de por su extraordinario y mágico swing, que lo convirtió en el que ha sido probablemente el mejor golfista europeo de todos los tiempos.

El Barça recupera la Liga

Los azulgrana vencen al Ademar y rompen virtualmente la racha de cuatro tìtulos consecutivos del Ciudad Real

MANEL SERRAS -El País- 07/05/2011
 
 
Para un equipo formado para ganar, estar cinco años sin ninguno de los dos grandes títulos de la temporada era un auténtico drama. La Liga Asobal y la Copa de Europa se le resistían al Barcelona desde que Xesco Espar estuvo sentado en el banquillo y ganó las dos competiciones, en 2006 y 2005 respectivamente. Fueron los últimos grandes éxitos de un conjunto que estaba en descomposición y que sufrió una auténtica renovación en los siguientes años. Pero el Barça ha recuperado hoy la senda de los títulos; se ha impuesto en su propia pista, el Palau Blaugrana, al Ademar León (28-27) y, virtualmente, ha roto una racha de cuatro títulos seguidos del Ciudad Real, porque los dos equipos tienen empatado el average particular y en el global la diferencia de más de 50 goles -57 antes de esta jornada- es prácticamente insuperable para los manchegos. El Barça puede, pues, proclamarse campeón por 18ª vez aún perdiendo los dos últimos partidos.
El partido ha sido a muerte desde el principio hasta el gol de la victoria conseguido por Víctor en los últimos segundos. El Barça había fallado en el primer intento de asegurarse el título la semana pasada en la pista del Ciudad Real, pero esta vez no quería ceder. El Ademar le plantó cara, pero los azulgrana han sabido aprovechar la oportunidad que se les brindaba de dar un paso casi definitivo. El Barça afrontaba el partido con la moral a tope, tras la exhibición que el pasado domingo realizó en Alemania para eliminar al Kiel en las semifinales de la Liga de Campeones y clasificarse para la Final Four de Colonia.
La Liga Asobal es la mejor corona que logra Xavi Pascual, después de que su equipo fallara en los últimos minutos de la final de la Copa de Europa que perdió ante el Kiel la temporada pasada. Tras la etapa de Espar, la sección sufrió una metamorfosis con la llegada de Manolo Cadenas, que no logró adaptarse a la entidad azulgrana. Acabó mal y fue sustituido por Pascual, que el año pasado ganó la Supercopa, la Copa Asobal y la Copa del Rey. Un bagaje salvador, pero no suficiente para un equipo que cuenta con el mayor presupuesto del balonmano español.
Esta temporada, sin embargo, Pascual había retocado a su gusto la plantilla y había formado su propio equipo, con la llegada de Raúl Entrerríos, Johan Sjostrand, Cedric Sorahindo, unidos a la incorporación de Sarmiento, Saric, Igropulo y Rutenka que habían llegado un antes. Y acertó. Lo demuestra la Liga que virtualmente acaba de conseguir dos jornadas antes de la conclusión.