martes, 5 de abril de 2011

ENTREVISTA

IÑAKI PINEDO.

José Manuel Marañón.

Con “Los Otros Guernicas” el realizador de Cantabria Iñaki Pinedo cierra su “Trilogía de la Memoria”, los otros dos  documentales que la componen son “El hombre que murió dos veces” (2003) y “la Escuela Fusilada” (2006)


-¿Cuáles han sido los principales retos al afrontar el proyecto de “Los Otros Guernicas”?

Por un  lado la búsqueda de financiación y la consolidación de un equipo de trabajo que tenía que comprometerse con el proyecto y que necesariamente debía de ser pequeño.
Por otro lado conseguir los testimonios necesarios para construir la historia que queríamos contar. El tema de los viajes ha sido una complicación añadida, hemos rodado en diferentes localizaciones de España, Francia y Estados Unidos

­ El trabajo documenta y recorre la trayectoria vital  de Luis Quintanilla pero, ¿Qué aporta más allá de lo puramente biográfico?

El documental utiliza la figura y la peripecia vital del pintor Luis Quintanilla para hacer una reflexión sobre la pérdida que supuso para la cultura española la muerte y el exilio de una parte muy significativa de los artistas e intelectuales de nuestro país como consecuencia de la Guerra Civil.

Luis Quintanilla es muy representativo de una generación de artistas comprometidos con la República, por los valores democráticos y modernizadores que planteaba para la sociedad española. El compromiso en su caso y en el de muchos otros, llegó hasta poner su vida en riesgo, algunos de sus amigos la perdieron,  en defensa de sus ideales. Engrosó el exilio, que para la gran mayoría de los artistas españoles supuso el olvido y curiosamente se ha convertido en uno de los repescados, es uno de “Los Otros Guernicas” que han emergido del silencio.

En el documental se mezcla su trayectoria vital con los aspectos humanos del personaje y con los momentos que le tocó vivir. Todo ello contextualizado dentro de una etapa particularmente dura de nuestra historia reciente.

- ¿Cómo era Luis Quintanilla?
Yo diría que Quintanilla fue un artista con una gran curiosidad, que se desenvolvió con gran calidad en distintas facetas artísticas: Grabador, Muralista, Pintor, Dibujante,….. Era un hombre al que le gustaba vivir la vida a tope, no se lo pensaba dos veces cuando le proponían algo interesante, como, por ejemplo ser boxeador o espía…… Y un hombre de una gran generosidad. Y por lo que me han contado con gran atractivo para las mujeres.

Su perfil es el de un artista comprometido con el tiempo que le tocó vivir, que mantuvo la coherencia y una actitud rebelde, y divertida,  hasta el final de su vida.

- El documental cuenta con veinte testimonios, ¿guarda algún recuerdo especial de alguno de ellos?

Dentro del contexto de la narración personalmente me emociona, como ya lo hizo en la entrevista en Brooklyn, el testimonio del brigadista internacional Matti Mattson.

- ¿Qué aporta Woody Allen al documental?

Woody Allen nos ayuda a situar a Quintanilla en el ambiente que el pintor frecuentó durante los 20 años de su exilio en Nueva York. En el Village neoyorkino  tenía su estudio y su casa familiar y era la zona de NY en la que vivían muchos de sus amigos. También representa al espectador accidental de los frescos en su “olvido cinematográfico”
-“los Otros Guernicas” cierra su trilogía sobre la Memoria histórica. ¿Qué balance hace de este proyecto?

Ha sido una experiencia muy enriquecedora. No se planteó inicialmente como una trilogía, se ha ido conformando con el paso del tiempo. Al acabar “La Escuela Fusilada” y ver  la respuesta del público sentí la necesidad de abordar otro tema relacionado con la recuperación de la memoria, y entonces apareció Quintanilla y lo tuve muy claro.
-Desde una perspectiva humana, más que como realizador, ¿qué ha aprendido de este proyecto histórico?

He aprendido a ponerle cara a los aspectos más difíciles de la historia reciente de nuestro país, en este caso relacionados con la República, La Guerra Civil y la Dictadura.

He fortalecido mi compromiso con la reivindicación de que la sociedad española tiene derecho a conocer en profundidad lo que paso en nuestro país durante los trágicos años de la guerra civil y de la dictadura.

He disfrutado de la generosidad de personas que me han contado experiencias personales y familiares  muy traumáticas que emocionaban a todo el equipo y que en algunos casos no las habían contado nunca. Y lo único que pedían era que se hiciera justicia, que se reconociera lo que había pasado, que les ayudaran a localizar a sus parientes para, al menos, saber donde estaban……..Y estas peticiones nunca se hacían desde el revanchismo o la venganza.

Creo que las personas que han sufrido directa o indirectamente situaciones injustas como consecuencia de la Guerra Civil y de la Dictadura tienen derecho  a que se  reconozca y repare social, jurídica y políticamente esas injusticias y ese sufrimiento. Esta, sin duda, es una asignatura pendiente de la democracia española.

-¿Cómo definiría brevemente la trilogía de la memoria?
Un soporte de “Memoria Viva”  que pretende participar en el análisis crítico de nuestra historia reciente.
- ¿Algún proyecto en mente?
Estoy colaborando con mi compañero de aventuras, Daniel Álvarez, en su próximo trabajo, un documental sobre una red de espionaje aliado en los años cuarenta en la España Franquista, que por cierto toca mucho a Cantabria.